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VUELVEME A QUERER

La lepra no es contagiosa

Gracias al avance de la ciencia, reconoce el entrevistado, la sociedad ha cambiado, pues sabe que la lepra no es contagiosa. Todavía hay quienes, producto de la ignorancia, no saben que la enfermedad no se traspasa a los hijos, o nietos, sino que depende del sistema inmunológico de la persona.

La lepra es una enfermedad infecciosa originada por el bacilo de Hansen. Afecta la piel y los nervios periféricos, al punto de perder la sensibilidad.


“La lepra tiene cura. Toda enfermedad, por rebelde que sea, se cura, con fe en Dios y sin miedo. Lo que queda son secuelas de la enfermedad, lo bueno es que estamos vivos, dando testimonio de lo que sufrimos, como fue el rechazo de la familia, de la sociedad y de la Policía cuando nos sacaban a la fuerza de nuestras casas”, refirió Pedro.



El Mal de Hansen, conocido mundialmente por lepra, fue descubierto por un noruego, y descubriéndose antiguamente en los países como china, Egipto y la india, por la cantidad de habitantes y por nulidad de transmisión como enfermedad infecciosa. Hoy en día la organización mundial de la salud ofrece unas cifras estimables de leprosos en el mundo con dos o tres millones existentes seguían discapacitados latentes de esa enfermedad.

Quiero que me mires y bien, sé que no soy igual a todo el mundo porque mi piel está desintegrándose, se también que puedo ser muy burdo o tosco para declamar este silencio que hace que me diferencie de los demás que andan sueltos en mitad de la vida, vida que me fue negada por involuta, aislado de todo el mundo para no contagiar a nadie, sabiendo que no se contagia muy fácilmente con un tocamiento o un acercamiento de estar cara a cara y poder llevar una conversación profundamente, solo ignórame, que eso es más fácil que venir a verme y ponerme atención en lo que me he convertido, un pedacito de piel o quien vive en un perímetro que todo el mundo cree que es un nido de ratas muriéndose y descascarándose como cual pared blanca en medio de la iglesia por la humedad que las lluvias hacen que se limpie la suciedad de sus techos o tejas pero su efecto colateral es arruinar por dentro lo maravilloso de sus paredes.

No hace falta los ramos de flores, no sanan dolores, si busco y no estás, no hace falta una prueba de solidaridad sabiendo que no te nace del corazón, siempre tengo a restos humanos a mi lado por culpa de esta enfermedad infecciosa que nos azota a toda la aldea en la cual albergamos; me duele el corazón saber que vivimos en un mundo de la cual siempre hay selectividad pero no juzgo ni critico porque cada quien elige, si , de eso mismo se trata de elegir, de tomar decisiones, es como cuando se encuentra una amistad, lo tomas para decir hola y adiós o una que te hace decir hola podemos conversar, pero yo me encuentro solo en medio de todo el mundo, soledad que me seria negada tal vez si estuviera en una celda de presos pero lo que es peor es estar libre y aislado para no sentir ese repudio que hoy sentimos por todos los demás y mucho más por los que tienen una enfermedad viral o infecciosa como el vih, sida, tuberculosis o la lepra.

No quiero denotar amargura, mucho menos impaciencia para no tener a nadie quien me visite, porque se estoy solo, pero con la ayuda de muchos solidarios jóvenes y voluntarios nacionales y extranjeros hacen que nuestro cielo se torne más celeste que de costumbre en medio de esta mi Nicaragua preciosa, que cueste lo que cueste siempre somos una sola nación. Hoy por hoy tenemos a nuestro divino leproso como lo es José de la Cruz Mena, quien sufrió y padeció por más de diez años la terrible enfermedad y ahora se convirtió en un máximo icono de nuestra cultura nicaragüense.

Me cuesta mucho convivir pero no con los que padecen lo mismo que yo sino de convivir en esta ciudad, en esta misma isla de aserradores con personas que son humanos sin ser humanizados, los cruentos dolores que azotan a cada uno de nosotros y otros en fases terminales siempre quejándose de los incontenibles desgarros de la picazón o del desprendimiento de un trozo de carnecita viva , es como si nuestros ojos no quisieran ver más allá de lo que nosotros mismo presenciamos, cuanto daríamos por no vernos desintegrarnos pero nadie puede ayudarnos ni siquiera la misma sulfona, son procesos terminales de todo ser humano que llegaran a ser desintegrados en el polvo que dios mismo nos hizo de allí, iniciando un paraíso para todos nosotros.

Muchas veces hemos visto lo que todo año nos pide por tradición veamos en semana santa; la vida de Jesús o lo que es mejor la santa biblia y sus historias bíblicas y una de ella es la que en ese entonces me llenaba de lágrimas y hoy por hoy lo estoy viviendo, es simplemente la historia y parte casi última de Benhur, Judá Benhur, donde a su retorno a la ciudad, no encuentra a su madre Ruth ni mucho menos a Tilsa su hermana menor, porque estaba siendo aisladas en mitad de la ciudad como pequeñas cárceles donde no había ningún tipo de ventilación, juzgadas por un antiguo imperio y Judá siendo trasladado a las canteras para su destrucción personal obligándolo a muchos trabajos forzados y demás, pero pese a que no soportaría, regreso con más fuerzas que ninguno y recuperar a su familia, con ayuda de otra parte del imperio llegó a ser el máximo brazo derecho de este, y así poder destruir a quien le envió en ese entonces a esos lugares de esclavitud. Ruth y su hija fueron encarceladas hasta su muerte, pero lo que encontró Judá a su regreso fue el saber que su madre estaba siendo aisladas al huerto de los leprosos, donde tenían la piel desgarrada y las vendas en todo el cuerpo para que no se cayera lo que todos sabemos, observándolas desde lejos y hacer nada para sacarlas de allí o darles lo que es mejor una cura, siendo así fue por producto de la fe que logran curarse y agradecer a Dios por tan bello milagro producido por la lluvia de limpieza de la ciudad, que momento tan majestuoso y feliz que se vivió para él con su familia, hoy en día solo nos toca el consuelo hasta esperar el último de nuestros días, con la mirada que queremos decir muchas cosas pero nadie nos comprendería o solo sería un diario abierto y cada quien llevarse un poquito de experiencia de solidaridad y todo quedaría en ello, con esto no estoy reclamando nuevamente lo mucho que hacen las voluntarias, sino más bien lo que nos dan es demasiado, mi reflexión es para quien no sabe de esto y que existimos y quedamos siendo una isla turística, somos piedras que se convertirán en cerámicas y que poco a poco se va deteriorando, pero no solo somos eso sino que sentimos, que deseamos ser queridos, que nos vean como parte de esta vida, de su semejante, y que tenemos fuerzas para seguir adelante pese a toda la adversidad, no solo vivimos en una aldea, o en el mismo leprocomio o con revisión dermatológica o porque eso ya no tiene cura igual moriremos mañana o pasado solo quiero que me vuelva a querer y no me mires como un roedor que se muere si lo pisas, mis lágrimas salen para que me sientas para que te detengas y me observes a lo más mínimo y pese a mis erupciones dermatológicas, veas mis ojos, mi mirada, por dios suplicó que te detengas porque no hay nadie con vida y que hable como tú, ser humano para que no me ignores, porque siempre sabrás que existo, ayúdame a vivir mejor y no me ignores. Contágiame tu aliento a seguir con esta vida, contágiame de tus ganas de vivir y de no tan solo darme un minuto de tu atención sino de tu corazón.

Dicen que el tiempo cura todo pero cien o mil años son muy pocos, porque es estoy seguro que aunque pruebes con el mundo tu vendrás para ser feliz conmigo.

Quiero llegar a la gloria pero con mi silencio porque no he tenido a nadie quien pueda descifrar lo que llevo dentro y mucho menos que le importe, amo lo maravilloso que me otorga la vida y lo que dios me pone a prueba porque prefiero sufrir con amor que sufrir por algo que no creo, la vida siempre estará allí como la muerte pero lo más importante y esperanzador que al final lo conoceré y él será la persona que siempre busque para ser feliz y encontrarme conmigo mismo.

Vuélveme a querer……


*Los escenarios que se utilizaron fueron parte de la historia inspirada de un gran icono de la música nicaragüense y donde terminó sus días.


-Olav A.-

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