"LOS INADAPTADOS"
- Olav Alcántara
- 2 feb 2018
- 2 Min. de lectura

Fue aquella vez en que dos seres humanos se encontraron por diferencia de un día, aquel día llamado Agosto; el, quería solo empezar a tener una nueva historia, ella por su parte ya tenía una historia, pero ambos congeniaron en todas las grandezas diminutas que se pueden encontrar frente a una carpeta para almorzar. Todo empezó con una melodía y luego llegar a verla en las gradas de las escaleras sentada con un libro en la mano, aquel libro de una famosa escritora chilena Isabel Allende, "El Diario de Maya", compartiendo algunos títulos después de haber terminado de decir Hola, buenos días. Él era nuevo en ese lugar mientras que ella ya tenía un día ganado y conocido, le fue más fácil entablar relaciones por ser mujer ---ya que era muy tímida y temerosa-- después de haber terminado de compartir los muchos placeres de un inadaptado, encontró la manera de hacer uno con los pensamientos llevados de la mano.
Cada quien traía consigo su mundo, sus ideas, sus pensamientos y por nada del mundo iban a exiliarse para un acoplamiento de agrado y madurez, era la forma de ser de cada quien, con todos sus defectos y ademanes, la cultura o la ignorancia que cargaban a cuestas, esa era la nueva amistad que se estaba formando entre ella y el. Dos chicos que con una década de diferencia pero la memoria y los recuerdos se reflejaban en el mismo tiempo.
Hoy en día la amistad se ha hecho cada vez más fuerte y más extraña llegando al abismo de ser cuatico, pero no vulnerable, aunque muchas ocasiones se limitan a decir sentimientos emociones para no criticarse entre sí, ella con todo su esplendor no tiene reparo alguno y el por su vía es más apacible pero no considerado en el momento de ser directo o recto en sus opiniones sin importar que sea una dama. Los comentarios son más altisonantes, crudos, tanto que pareciera que se escribiese un guion para un documental de Europa central, frívolo y calculador.
Entre ellos comparten casi todo, el día, los comentarios mal intencionados, las risas, los documentales, los libros, la comida en algunas ocasiones, la música (parte importante) en su vida que es como la melodía que nunca se quitan del oído para andar y hacer de su día uno mejor que el anterior. etc.
Resumiendo el círculo cerrado que ambos comparten en sus cerebros no cabría uno más para ser el triángulo accidentado de sus vidas, son celosos y muy posesivos con sus ejemplares. Así es la relación amical de Barbie y Ricky. Hasta que la frontera los separe.
-Olav A.-
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