BUSCANDO EL NORTE
- Olav Alcántara
- 8 feb 2018
- 4 Min. de lectura
Para todos aquellos que alguna vez se desprendieron de vida, de sus orígenes, de su país, de su familia, amigos y todo lo que abarca una vida para poder salir adelante pese a las adversidades.

Sevilla, 08 de febrero del 2018.
Para todos no es novedad que emigrar es diferente de viajar por turistear o simplemente por vacaciones, es una situación de abandono, desprendimiento de lo tuyo, de todo lo que te rodea por hacer unas maletas e ir con tus extremidades a un punto planificado o por una necesidad. Dejarlo todo no es necesario de renunciar a ello, ya sean cosas, personas, lugares, o etapas, es diferente. Uno cree o tiene la ilusión que necesitas aires nuevos y que vas con una meta que cumplir para lo que fuere, -ya sea que no encuentras en casa o que buscas oportunidades de superación-. Unos dichos dicen: “por mi mejoría, hasta mi casa dejaría” otros simplemente: “no cambiaría jamás lo nuevo por lo viejo” y algunos: “más vale algo conocido que algo por conocer”. Son tantas las historias que se leen, escuchan y se saben que no lo vives hasta que te pones detrás de una barandilla en la zona de migraciones listo para abandonar el barco y zarpar en un avión hacia un lugar completamente desconocido.
Cuando llegamos al lugar indicado creemos que ya lo hemos conseguido todo, tenemos por el momento, casa, comida y poco dinero que se trae como bolsa de viaje, algunos nada en los bolsillos, esto si es que no te han robado por el camino. Pero siempre imaginamos algo grande se avecina y lo voy a cumplir, tienes todos los mejores ánimos, y positivismos en tu cabeza y a flor de piel tu esperanza de conquistar un mundo completamente ancho y ajeno como lo dijo un escritor famoso. Pero a la hora de la hora, los días pasan y no encuentras nada, la comida se termina y los gastos personales se hacen presentes con mayor afluencia, y el muerto empieza a apestar al tercer día.
Si los que te acogieron a tu llegada, están siempre velando por tu seguridad y aliento de salir a flote, es mucho mejor de los que no tienen esa ventaja, porque hay otros que nadie lo espera después de aterrizar el avión, solo sus maleta y las ganas de salir adelante para sobrevivir y luego ayudar a los suyos en lo más lejano que se encuentren. Hay quienes hemos dejado más que un pasado, una vida. Pero no nos importa si es que triunfar es significado de desprenderse de algunas cosas o personas. Pero no hay garantía de que ello suceda, solo hacer que suceda con el pasar de los días. Luego de instalarnos en el lugar que hemos llegado, queremos solo buscar un punto de encuentro, encuentro con algo más cercano a tu cultura, pero no lo hallas sin conocer, gente que está en su mundo, que no habla el mismo idioma que tu y mucho menos el mismo lenguaje, personas que cada quien va a lo suyo y continúa con su vida metódica y rutinaria mientras que tu solo estás más solo que la una en busca de lo que sería tu nueva vida.
Tienes cobijo y sobre todo estudios profesionales pero terminas trabajando en o que te pueda dar unos centavos para vivir, te sientes desilusionado, fracasado hasta cierto punto cuando ves las cosas un poco más grises o turbias, la desesperación se hace presente luego de tener unos meses y no encuentras lo que necesitas: un trabajo honrado, honesto y luchador, ósea la gran oportunidad de demostrar lo que vales profesionalmente, pero eso tampoco se hace presente, te enfocas en conseguir lo que sea necesario para vivir, extrañando a los tuyos y no teniendo a nadie, porque la familia o el lugar donde vive so te acogen solo es eso, una casa de hospedaje al fin y al cabo, no te ayudan mucho en lo que creías, pero al menos no te falta un lato de comida y una cama donde dormir.
Y es que migrar no es nada fácil, es como una decisión de por vida, un proyecto de vida en grande a largo plazo como muchos que escogen entre otras cosas o vivencias: algunos se casan, otros entran a la vida religiosa, otros tienen hijos, otros más hijos y algunos migramos. Este es ultimo es un sacrificio mas no un sufrimiento, pero sacrificio que despojas unos para obtener otros y es parte de la vida, si bien es cierto, los padres nos crían para aventurarnos en la vida pero es mucho más fuerte el estar solo en medio de todos y no sentirte algo importante, solo tus fuerzas, tu fe y tus ánimos de echar camino y conseguir a todos los santos que te ayuden a conseguir alguna oportunidad laboral para dar marcha a tus necesidades y estudiar algo más de lo aprendido.
Siempre que estas solo quieres estar en la redes sociales para no sentirte miserable, -y si tienes a alguien vaya saber dios si es afine contigo o no-, pero lo más seguro es que empieces a conseguir amistades en la calle y te hagan conocer y sentir como en casa, porque sin ellos no podemos vivir, es lo más bonito de la amistad que muchos te la ofrecen con un hola y solo tratas de conservara por más efímera o superficial que sea, un amigo es un amigo y más si es del país anfitrión donde te encuentras. Ya saben las reglas de casa. Un paisano es más difícil dependiendo de qué país sean, porque hay muchos migrantes que ayudan a sus paisanos ya que su misma cultura se los enseña y se rigen por ese orden pero hay otras que hacen que tú te sientas más extranjero que los mismo lugareños y no te den la mano en nada pese a que te vean que estás sufriendo por conseguir o luchar por ese algo que anhelas.
Señores buscar un horizonte, o la luz al final del túnel siempre llega, pero también hacen que tu veas la oscuridad en el camino, pero dejemos que el destino y Dios no ampare, nos apriete pero no nos ahorque, y que sobre todo, si salimos de casa es para ser algo mejor y hacer que funcione, que buscando el norte es donde llegamos cada día.
-Olav A.-
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